Cuando buscaba libros del poeta catalán Miquel Martí i Pol encontré a Joan Margarit. Leí tres o cuatro poemas, una entrevista y vi varios videos. La fuerza de su figura, su voz teatral y la carnalidad de sus poemas me deslumbraron. Hice a un lado la búsqueda inicial y conseguí la poesía completa del premio Cervantes 2019, que no recibió en acto público por la pandemia.
Arquitecto y profesor, era considerada el mayor poeta vivo catalán, autor, además, de una obra escrita simultáneamente en español y la lengua de Cataluña; no son traducciones, defendía él, son poemas que se escriben en sus propios idiomas.
Hoy me desperté con la triste noticia de que murió Joan Margarit. Fue inevitable recordar aquellos versos del libro escrito a su hija, Joana, mientras se iba muriendo frente a sus ojos. Poemas desgarradores, de amor y dolor.
Por Joan Margarit, entre otras razones, empecé hace algunas semanas a estudiar catalán. Quería leerlo en su idioma y, de paso, a Miquel Martí i Pol, quien me condujo, involuntariamente, al territorio de su poesía. Lo haré un día, no sé cuando, pero estará frente a mis ojos.