Un tema ocupa los debates en las redes sociales que navego: el anuncio de un acuerdo con la CNTE para que los egresados de las escuelas normales tengan plaza en automático. Lo que para muchos constituyó un gran paso adelante con la reforma educativa de 2013 [luego empañado por las formas en que se concibió e instrumentó la evaluación para la permanencia], tiene redactado el epitafio.
Si se consuma, además del adiós a los concursos de ingreso, los egresados de las facultades universitarias de pedagogía y educación estarían marginados de la carrera docente, pese a tener muchas virtudes y haber demostrado capacidad para enriquecer las plantas de maestros de educación básica.
La historia, sin embargo, está viva y todavía podrían ocurrir modificaciones a lo previsto.
La división en el gremio de investigadores y articulistas especializados es una escalada más entre las visiones antagónicas sobre el sistema educativo nacional, su presente y futuro. Argumentos sólidos y esponjosos circulan en el debate. Hay un saludable intercambio en ciertos niveles, pero también diatribas y dogmatismo; lucidez, pero también insensatez.
Cada cual tiene derecho a expresar lo que se le venga en gana y los demás no tienen la obligación de compartirlo, ni el derecho a descalificar personas. Esa delicada frontera se rompe con facilidad.
Ojalá el debate nos vuelva más tolerantes, sensibles a la opinión discrepante y un poco menos soberbios con nuestros argumentos. En Twitter hoy preguntó Eduardo Sacheri, escritor argentino: ¿qué necesidad de ser tan hegemónicos?
Julio César
Qué difíciles decisiones, que si bien pueden beneficiar a algunos a otros nos afectaría. Aunque en Colima, tampoco habría basto para otorgarles plaza a todos los normalistas, pues según el secretario de aquí, dice que no hay. Me pregunto¿Cuántos pudieran tener plaza en Colima en cada generación? A fuerza tendrían que concursar para otorgar las pocas que hay o esperar a que todos lo maestros con doble plaza se jubilen.
Julio César Torres
Qué difíciles decisiones, que si bien pueden beneficiar a algunos a otros nos afectaría. Aunque en Colima, tampoco habría basto para otorgarles plaza a todos los normalistas, pues según el secretario de aquí, dice que no hay. Me pregunto¿Cuántos pudieran tener plaza en Colima en cada generación? A fuerza tendrían que concursar para otorgar las pocas que hay o esperar a que todos lo maestros con doble plaza se jubilen.
Julio Cesar Torres
Una decisión muy difícil, que en caso de que así sea aprobada, sí nos afectaría muchísimo. Considero en lo personal, que aunque les lleguen a dar plaza en automático a los egresados de las normales, de alguna manera, también podrían seguir concursando entre ellos mismos; pues si hablamos de Colima, por ejemplo, según el secretario ya no hay plazas. Lo cual me pregunto ¿Cuántas plazas automáticas podrían ofrecer a los egresados el año que viene? De alguna manera, tendrían que seguir haciendo una elección entre ellos, ya que si no hay muchas, quizá los elijan por su promedio de carrera y si siguen con los exámenes o con el mismo proceso de este año, pues la ventaja para ellos es que nosotros los universitarios ya no seriamos sus competidores. Aunque a eso sí nos afectaría muchísimo porque en automático nos cerrarían una opción laboral.
Me gustaría que las universidades hicieran lo mismo hacia con nosotros los universitarios, darnos prioridad en las contrataciones.