Derivado de la pandemia y las necesidades que impondrá el acondicionamiento y funcionamiento de las escuelas, en 2021 se requeriría una inversión específica para tales acciones.
Además, fortalecer la planta docente para la atención de grupos y estudiantes se vuelve imperativo. Esa es una de las razones que tienen en vilo el inicio de clases en distintas regiones de España: los maestros reclaman la contratación de más profesores y condiciones que aseguren un retorno con riesgos mínimos.
La ecuación es evidente: cubrir más necesidades, tener escuelas equipadas y seguras, maestros y personal suficiente no se puede lograr sólo con discursos. Faltan presupuestos: prueba de fuego de la coherencia entre palabras y hechos.
El presupuesto que presentó el gobierno federal a la Cámara de Diputados creció apenas entre lo aprobado para 2020 y el proyecto para 2021, según las cifras oficiales, pasando de 337,476.8 millones de pesos a 338,046.9 millones, cantidad que representa una reducción del 28.4 a 27.2% del presupuesto global.
Siguen otras etapas del debate legislativo y podrían destinarse más apoyos a las escuelas y a rubros críticos que se desestimaron en los dos años recientes, como la formación y actualización de maestros. La película empieza, pero amanece repetirse la trama.