Esta tarde soleada de viernes o sábado, no sĂ© con exactitud, sentado frente al mar, en una playa con la cantidad mĂnima de gente, tomo mi libro de Juan JosĂ© Millás y Juan Luis Arsuaga: La conciencia contada por un sapiens a un neandertal, dispuesto a llegar a la Ăşltima de sus páginas.
El tercer volumen de la trilogĂa me ha costado terminarlo. No sucediĂł lo mismo con los anteriores. El primero, La vida contada por un sapiens a un neandertal, lo devorĂ©; con el segundo demorĂ© un poco más. Con el Ăşltimo pasĂ© ya semanas, meses en su lectura. EmpecĂ© más o menos bien, a buen ritmo, luego, el lenguaje usado, los compromisos docentes, como planear clases, calificar y descansar de todo ello, más los otros deberes acadĂ©micos (un artĂculo periodĂstico, un capĂtulo para libro, una conferencia…) postergaron la continuidad de la lectura.
Si juzgara la calidad (su relevancia + mi interĂ©s) de los tres volĂşmenes por el tiempo invertido en cada uno, dirĂa que fueron decreciendo. Si hubiera un cuarto volumen no estoy seguro de buscarlo.
AprendĂ de cada uno, quede claro. Del estilo literario atrapante de Millás, de la claridad cientĂfica de Arsuaga y sus conversaciones; del afán de enseñar y aprender puestos en juego.
Mi dinero y tiempo estuvieron bien invertidos. Es mi balance final.
