Llego a la banca temprano, más que de costumbre. Una sonrisa me reflejó el espejo al despertar y el indicador del ánimo fue a tope. La razón es simple: dormí como bebé, luego de una noche
Sentado en la banca de la plaza, temprano todavía, escucho una nueva cancioncita de alguna candidata a no sé qué cargo. No puse atención, aunque las letras, de mal gusto unas, pegajosa otra, me
Después de unos días de vacaciones, lejos de casa y la ciudad, regresé a la banca en la plaza. Volví con otra alegría. Disfruté la mañana fresca, sentí los aromas del parque al aspirar con
–La vida exige una pasión, aprendiz. Así lo escribió el maestro Jorge Luis Borges en uno de sus cuentos. –La vida exige una pasión –repetí, sorprendido por la súbita llegada del loco
-¿Qué lees? -me preguntó sigiloso. Esta vez no lo sentí, no lo escuché ni esperaba. Me asustó. Repuesto, le mostré la portada del libro: Chomsky & Mujica. Sobreviviendo al siglo XXI. -¡Te